33422 - La Miranda (Llanera)
Llanera - Asturias
Tel. 985773530
Tardábamos unos 30 minutos en llegar a Gijón, la ventaja era que de regreso por las noches pasábamos por dos centros comerciales en los que podíamos cenar y hacer nuestras compras. Pero vamos a por la opinión del hotel, que es lo importante:
Primera impresión: Gran aparcamiento. (Fantástico para nosotros, ya que dejarla en Gijón no era una opción). Llegamos de noche, muy tarde y hambrientos. Muy famélicos para ser exactos. Hicimos el Check-In y el recepcionista nos animó a que pasáramos por el restaurante a tomar algo. Lo hicimos y ya estaban fregando pero insistieron en que nos prepararían algo para cenar. Así que les pedimos unos bocatas por lo de "que sea rápido y sin ensuciar mucho, que me sabe mal a estas horas daros trabajo". Lo agradecí con todo mi corazón, lástima que el pan estuviera seco y que nos pegaran un sablazo que-pa'-qué.
Subimos a la habitación y ¡sorpresa!
Primera impresión: Gran aparcamiento. (Fantástico para nosotros, ya que dejarla en Gijón no era una opción). Llegamos de noche, muy tarde y hambrientos. Muy famélicos para ser exactos. Hicimos el Check-In y el recepcionista nos animó a que pasáramos por el restaurante a tomar algo. Lo hicimos y ya estaban fregando pero insistieron en que nos prepararían algo para cenar. Así que les pedimos unos bocatas por lo de "que sea rápido y sin ensuciar mucho, que me sabe mal a estas horas daros trabajo". Lo agradecí con todo mi corazón, lástima que el pan estuviera seco y que nos pegaran un sablazo que-pa'-qué.
Subimos a la habitación y ¡sorpresa!
Espaciosa, bien amueblada: cama muy amplia, TV, hilo musical, mini-bar (vacío), baño equipado con secador y con estos obsequios de bienvenida.
La habitación era tranquila, sin ruidos, exterior y por la mañana descubrimos que teníamos estas vistas desde nuestra ventana:
Qué lástima que la conexión a internet no fuera gratuita. En fin, no se puede tener todo.
A la hora de la ducha descubrí que tenía buena presión de agua y pensé ¡genial! pero la "alcachofa" no se aguantaba derecha y caía "un poquito-bastante" de agua por todas partes.
Desayuno: Era un buffet libre el que nos entraba con la habitación. Quizás no fuera el buffet más espectacular de todos los tiempos, pero encontrabas lo que necesitabas para ir a trabajar con la tripita llena: café, leche, zumos, cereales, bollería, pan, embutido, fruta.. Había leído críticas negativas al respecto, pero yo no las vi. Creo que fue correcto porque tampoco soy de las que desayuna chorizos fritos con huevos fritos y bacon frito. La chica del comedor muy simpática y encima, si necesitabas algo te lo iba a buscar.
Buscando "peros" diré que me sorprendió que no aspiraran el suelo de la habitación mientras estuvimos allí:
¿Se aprecian en la foto las pelusillas?
Y otro "pero" sería que si no tienes vehículo propio, dependes de un transporte público escaso por la ubicación del hotel.Desde luego, por ser un tres estrellas está muy bien. ¿Volvería? Pues si. Se adaptó a nuestras necesidades y aproveché que la nevera del minibar estaba vacía para llenarla de comida y bebida nuestra (otra manera de ahorrar en los viajes).
Puntuación: 6/10
Pues conociéndote como te conozco, sé que la relación calidad- precio no puede ser exagerada, y más por las criticas. Vale, no es el paraíso en el que a todos nos gustaría pasar la noche, pero como dices, cumple la función así que supongo que la visita no resultó terrible :)
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